jueves, 31 de marzo de 2011

La casita.

Cuando las sombras invaden mi corazón.
intento esconderme en mi oscura habitación,
miro en el techo,brazos aparecen estirándome sus manos.
Quieren que valla y deje mi lucha en el olvido,
no es justa ni tampoco valorable la intención.
Confundidas almas miran mi mundo,
Salen del mi techo hambrientas de penas,
en su glotonería olvidan que pueden fallecer.
Tengo tantas penas que sus cadáveres explotaron.
solo restos de aquello que una vez me hizo tanto bien
se esparce por mi oscura habitación.